- Violencia física: Se refiere a toda forma de violencia que la que se usa la fuerza física, y que causa dolor, daño, heridas y hasta la privación de la vida: empujar, golpear, halar el cabello, quemar, torturar, mutilar, herir, etc.
- Violencia psicológica: La violencia psicológica es aquella que produce daños afectivos, morales y psicológicos sobre la persona sin que medie la fuerza física, lo que hace mermar su autoestima. Por ejemplo: culpabilizar, amenazar, coaccionar, espiar, ignorar al otro, desacreditar al otro, hostigar, acosar, aislar, irrespetar la opinión, etc. Incluye la agresión verbal por medio de insultos y descalificaciones.
- Violencia sexual: Es aquella violencia que denigra la integridad sexual de una persona, sea que haya contacto genital o no. Se entiende que la integridad ha sido vulnerada toda vez que la víctima no da su consentimiento expreso. La violencia sexual abarca: coerción, amenazas, intimidación y uso de la fuerza, violación, acoso, abuso, explotación sexual, trata de personas, prostitución forzada, etc.
- Aumentar las relaciones sanas, estables y estimulantes entre los niños y sus padres o cuidadores.
- Saber hablar (asertividad) y saber (escuchar)
- Desarrollar habilidades para la vida en los niños y los adolescentes.
- Reducir la disponibilidad y el consumo nocivo de alcohol.
- Fomentar la igualdad y la equidad.
- Cambiar las normas sociales y culturales que propician la violencia.
- Establecer programas de identificación, atención y apoyo a las víctimas.
- Impedir el abuso desde un principio.
- Reforzar la autoestima, dado que es lo primero que el agresor busca destruir. Además, generar independencia emocional y física; esto para poder dejar la visión de víctima y las actitudes de sumisión, desarrollar amor propio y respeto a uno mismo.
- Actuar con inteligencia emocional ante el abusador, poder regular nuestras emociones, en especial el miedo y la ira. Tomarse un tiempo fuera para poder calmar la situación y evitar actitudes de confrontación que puede llevar a mayores.
- Utilizar la asertividad como herramienta de comunicación y solución de los problemas. Conversar puntual la conducta que no se tolera y poner las reglas de convivencia claras.
- Solicitar ayuda, ya sea a familiares, amigos y a su vez acudir con un profesional.
- Dejar el miedo social “al qué dirán” y actuar.
¿Y LA DIGNIDAD DE LA PERSONA?
Sí, es una forma también de oponerse a la violencia y rechazarla, pues una persona con dignidad reconocerá de forma inmediata un maltrato o un acto agresivo y será el primero o primera en denunciarlo. Esto debido a que cada uno de nosotros debemos de crecer en un ambiente que promueva la dignidad como un derecho y este consiste en las condiciones necesarias para nuestro optimo desarrollo, rodeados de amor, cuidados y atenciones (alimentación, vestimenta, vivienda, educación, etc.), potenciar y formarnos en base a nuestros talentos y capacidades que a la larga puedan contribuir con nuestra familia y sociedad. Siendo libres y viviendo en base al respeto.
Lamentablemente la violencia rechaza todo esto y nos ofrece formas de vida indignas, basadas en el miedo, la agresión y transformando una realidad adecuada en una triste y deprimente. Pero, así como la violencia es aprendida, también puede ser desaprendida y para esto necesitamos crear una sociedad vinculada en la igualdad (donde todos gocemos de los mismos derechos), la equidad (donde tengamos las mismas oportunidades dependiendo de nuestras capacidad y aptitudes) y la justicia (haciendo eficaz el cumplimiento de las leyes para una mejor armonía social)
- ¿Crees que exista algún motivo para que la violencia sea justificada? ¿Por qué?
- ¿Por qué es importante rechazar la violencia de todos los ámbitos de nuestra vida?
- ¿Qué opinas sobre la equidad y la justicia como valores que actúan frente a la violencia?
- ¿Crees que todas las personas deben tener una vida digna? ¿Por qué?
5. Vas a elaborar una carta donde debes de expresar las consecuencias de actuar con violencia y mostrar tu rechazo con razones fundamentadas. Además, debes proponer acciones basadas en principios éticos y en la dignidad de las personas. Las acciones deben considerar las estrategias de autorregulación de emociones, el manejo de la ira y la solicitud de ayuda a la línea 100. El destinatario puedes ser tu misma o mismo, un familiar, una amistad o alguna persona que este siendo víctima de violencia.